¿Qué Es La Autofonía?
La autofonía es un raro padecimiento donde la persona es capaz de percibir su propia voz como sí retumbara dentro de su cabeza. es un trastorno que se presenta por alteraciones en la trompa de Eustaquio ya sea por algún tipo de obstrucción o por permanecer abierta.
La autofonía es una anomalía auditiva producida como resultado de una alteración de la trompa de Eustaquio, donde el paciente puede experimentar sensaciones extrañas en el interior del conducto auditivo como oír su propia voz encajonada o también la sensación de respiración. A esto también se le conoce con el nombre del síndrome de la trompa patulosa. Una manera bastante peculiar de aliviar los síntomas es colocar la cabeza entre las rodillas o acostarse boca arriba, con las extremidades libres.
Causas
Las causas de la autofonía se deben a trastornos en la trompa de Eustaquio, la cual en la gran mayoría de los pacientes se encuentra patulosa, es decir, está permanentemente abierta, lo cual provoca que el flujo de aire que debe transitar de la nasofaringe hacia el oído medio sufra alteraciones.
La función principal de la trompa de Eustaquio es controlar y al mismo tiempo regular la presión del oído medio. Cuando hay cambios y la trompa no cierra correctamente, esto altera el proceso normal, el cual es que la trompa se cierre y que cada cierto tiempo se produzca la apertura normal con intérvalos cortos donde están involucrados el velo del paladar y los músculos tensores.
Las causas también pueden deberse por alteraciones en el sistema nervioso central que cause lesión directa de la musculatura palatina. Otra causa que debe ser tomada en cuenta es la repentina pérdida de peso que pueda sufrir una persona debido a la presencia de patologías degenerativas y enfermedades relacionadas con el sistema inmunológico o endocrino y que pueden lesionar al tejido blando peritubular. (Ver artículo: Otoscopia)
Diagnóstico
Para realizar un diagnóstico de la autofonía la persona debe ser examinada por un especialista en la materia, quien basándose en una serie de estudios podrá precisar de forma más clara el padecimiento que aqueja al individuo. Entre los tipos de pruebas a practicar será necesario la otoscopia y el examen de audiometría
Otro tipo de evaluación que es necesaria para realizar un correcto diagnóstico es el examen endoscópico nasal, donde se podrá visualizar mejor la trompa de Eustaquio. También la resonancia magnética resulta fundamental para ver el tipo de patología que se está presentando, ya que se puede explorar áreas más profunda de la cavidad auditiva.
La timpanometría es un examen que permite medir la presión dentro del oído medio y sí hay no movilidad de la membrana del tímpano. En la actualidad se cuenta con una técnica llamada audiometría con enmascaramiento nasal, la cual es empleada para medir la transferencia acústica desde la nasofaringe hasta el oído medio. Con esto, se logra elevar el umbral en personas que experimentan frecuencias bajas y a través de este procedimiento se logra estabilizar la anomalía que existe en la trompa.
Tratamiento
Durante la exploración, el paciente manifiesta una notable mejoría cuando se le indica que se coloque en posición supina o que ponga su cabeza entre las piernas. Sólo con esta simple evaluación, ya el médico puede tener una idea de lo que sucede con la persona, sin embargo, para descartar otras posibles complicaciones, el especialista deberá realizar otros tipos de estudios más profundos
Existen algunos tratamientos menos invasivos para aquellos pacientes que sufren de sintomatolgoía leve y que no afectan en gran medida su calidad de vida. Por lo general, el médico aconseja evitar el uso de descongestionantes nasales, tomar abundante agua la medicación de ácido clorhídirco o clorobutanol puede ayudar a minimizar los síntomas en algunos pacientes.
Cuando los síntomas son más severos, lo más recomendado por el especialista es la intervención quirúrgica o técnica un poco más agresivas. Esto es sólo en los casos extremos, donde la persona ve afectada de forma significativa su calidad de vida y donde la patología, con el paso del tiempo tiende a empeorar.
El tratamiento para estos pacientes pueden ser la aplicación de inyecciones con toxinas botulínica, donde los resultados obtenidos han sido bastante satisfactorios. El tratamiento basado en cirugía es denominado miringotomía, el cual consiste en la colocación de un tubo de ventilación para aliviar los síntomas.
Otro procedimiento bastante empleado es la ligadura del orificio tubario faríngeo, la cual ha resultado ser muy exitosa, ya que la mejoría de los pacientes es notable al poco tiempo de la intervención.
Fuente: https://superatuenfermedad.com -Imagen de Free-Photos en Pixabay